martes, 1 de marzo de 2011

Inmortal

Para ti, que tal vez no conozcas mi pasado, ni el porqué de mis palabras, escribo en esta tarde extraña.

Quizá la ilusión de ocupar una pequeña parte de tu pensamiento mientras lees, es la que me lleva a hoy a ti.

Pensar que estas lineas estan siendo leidas en un tiempo en el que ya no existo, es sentir que existe una pequeña parte de inmortalidad.

Y quisiera que pudieras sonreir con las fantasias que en mi tiempo acamparon en mis ideas, sentir el calor que yo siento, el amor que me da fuerzas para creer en el mañana y la nostalgia del futuro que no viviré, del futuro que hoy es tu presente.

Todos creemos, pensamos, que aun nos queda tiempo. Que todo lo que vemos en nuestros mayores queda lejos, sin darnos cuenta que al decir esto, cualquier niño podría pensar lo mismo al mirarnos a nosotros.

El tiempo se detiene en el momento de pensar en el futuro, pero vuela al dejar de pensar en el. Y así recuerdo que ayer, cuando era niño, pensaba en como sería mi trabajo, mi mujer, mi vida. Y hoy, con casi treinta años, me contesto sin palabras...porque sólo tengo que mirar a mi alrededor y verlo, para sentir aquella sensación de incertidumbre que me acompañaba cuando era un enano: fFui un niño que veia casi imposible hacerse mayor y ahora me da miedo ser un joven que ve lejos ser un viejo y morir. Por que sé que llegará con la misma rapidez que llegaron estos treinta años, por que me imagino leyendo estas lineas con ojos temblorosos, y el cuerpo mustio pensando que no me equivocaba, que el tiempo ha volado tal y como creia.

A ti que lees, sólo te pido un favor. Vive. Piensa en mi un instante, en quien pudo escribir estas lineas, regalame unos segundos de tu vida, de tu aire, de tu presente y hazme inmortal, por un segundo

No hay comentarios:

Publicar un comentario